Surgido como contraposición al Art Nouveau, el Art Decó cambia las curvas y las líneas serpenteantes por el diseño de muebles y aparatos domésticos basados en líneas rectas, formas geométricas y compactas.
Asimismo, nuevos materiales obtienen su lugar gracias a este estilo: el metal, el cromo y la resina sintética cobran mayor protagonismo.
Entre 1920 y 1930 se sitúa el esplendor de este estilo, inundando los ambientes con sus formas rectas y en punta y distintos motivos geométricos.
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