viernes, 5 de noviembre de 2010

LIMPIAR EL ESPEJO

Los espejos se pueden limpiar con un paño que no suelte pelusa y frotarse después con un papel de periódico impregnado con un poco de alcohol.
Otro truco consiste en añadir unas cucharadas de amoníaco al agua con la que se limpia. Para quitar manchas resistentes, se debe dejar cubiertas un rato con aceite y luego limpiar suavemente la superficie del espejo con papel de seda.

No hay comentarios: